En la
alcantarilla Pennywise seguía tumbado en el suelo, comenzó a
moverse hasta que consiguió sentarse, le dolía el cuerpo pero a
pesar de no tener sentimientos él estaba triste por lo que le
acababa de hacer Kanna, ya que él la amaba y que lo tratara así le
dolió mas que los golpes, unas lagrimas comenzaron a salir de los
ojos del payaso. Él se hizo una bolita y se quedó en el suelo
llorando, era la primera vez que lloraba.
**Narra
Pennywise**
Me costó mucho pero logré ponerme en pie y sentarme en el colchón, mis moretones fueron desapareciendo ya que yo me auto-curo, pero sentía algo raro en mi, me sentía mal y era la primera ves que me sentía así, lo que acababa de ocurrir con Kanna me había echo daño por dentro, su manera de mirarme, sus palabras, su trato hacia mi todo eso me dolió mas que los golpes que me ha pegado, no se que me pasa pero no me gusta esta sensación, ademas yo no he matado a su madre, no se por que me culpa a mi sin ni siquiera dejarme demostrarle que yo no he sido, me duele que desconfíe de mi y que ni oiga lo que yo le decía. Yo no he sido y ella ni me ha dejado demostrarle que no he sido, ella me culpa a mi y no va a cambiar de opinión por mucho que yo le diga, me odia y eso me duele, me sequé las lagrimas y me levanté del colchón.
Tomé mi forma humana y salí de las alcantarillas a tratar de buscar a Kanna y convencerla de que yo no había sido el que ha asesinado a su madre, caminé por el pueblo pero no di con ella, entonces recordé donde ella me dijo que le encantaba ir, así que me dirigí hacia el bosque.
Al llegar la vi sentada en un banco con las manos cubriendo su rostro y llorando desconsoladamente, odio verla mal y odio verla llorar, así que me acerqué a ella y puse mi mano en su hombro, ella dio un respingo y miró en mi dirección, al verme se levantó del banco y se alejó de mi.
-Kanna: ¡Vete!.
Me miró con odio y siguió llorando.
-Bill: No llores.
-Kanna: ¿A no? Tu me has echo esto, tu eres el único culpable de que yo este así.
-Bill: Tienes que creerme yo no he matado a tu madre.
-Kanna: No te creo joder, vete de aquí asesino.
-Bill: Por favor Kanna, yo no he sido y puedo demostrártelo.
-Kanna: No me vas a engañar, estúpido payaso, ¡vete!.
Me quedé mirándola, me dolía su trato y me dolía verla llorar así.
Ella me miró con odio, se agachó agarró una piedra y me la lanzó a la cara, la piedra golpeó en mi frente, al instante noté como la sangre recorría mi frente hasta mi nariz.
-Bill: ¿Por que haces esto? Yo no he sido Kannita ¿Por que no me crees? Yo te amo y jamás haría nada que te perjudicara a ti.
-Kanna: ¡Que no me llames así! Y no te creo nada estúpido.-Se agachó agarró otra piedra y me
Me costó mucho pero logré ponerme en pie y sentarme en el colchón, mis moretones fueron desapareciendo ya que yo me auto-curo, pero sentía algo raro en mi, me sentía mal y era la primera ves que me sentía así, lo que acababa de ocurrir con Kanna me había echo daño por dentro, su manera de mirarme, sus palabras, su trato hacia mi todo eso me dolió mas que los golpes que me ha pegado, no se que me pasa pero no me gusta esta sensación, ademas yo no he matado a su madre, no se por que me culpa a mi sin ni siquiera dejarme demostrarle que yo no he sido, me duele que desconfíe de mi y que ni oiga lo que yo le decía. Yo no he sido y ella ni me ha dejado demostrarle que no he sido, ella me culpa a mi y no va a cambiar de opinión por mucho que yo le diga, me odia y eso me duele, me sequé las lagrimas y me levanté del colchón.
Tomé mi forma humana y salí de las alcantarillas a tratar de buscar a Kanna y convencerla de que yo no había sido el que ha asesinado a su madre, caminé por el pueblo pero no di con ella, entonces recordé donde ella me dijo que le encantaba ir, así que me dirigí hacia el bosque.
Al llegar la vi sentada en un banco con las manos cubriendo su rostro y llorando desconsoladamente, odio verla mal y odio verla llorar, así que me acerqué a ella y puse mi mano en su hombro, ella dio un respingo y miró en mi dirección, al verme se levantó del banco y se alejó de mi.
-Kanna: ¡Vete!.
Me miró con odio y siguió llorando.
-Bill: No llores.
-Kanna: ¿A no? Tu me has echo esto, tu eres el único culpable de que yo este así.
-Bill: Tienes que creerme yo no he matado a tu madre.
-Kanna: No te creo joder, vete de aquí asesino.
-Bill: Por favor Kanna, yo no he sido y puedo demostrártelo.
-Kanna: No me vas a engañar, estúpido payaso, ¡vete!.
Me quedé mirándola, me dolía su trato y me dolía verla llorar así.
Ella me miró con odio, se agachó agarró una piedra y me la lanzó a la cara, la piedra golpeó en mi frente, al instante noté como la sangre recorría mi frente hasta mi nariz.
-Bill: ¿Por que haces esto? Yo no he sido Kannita ¿Por que no me crees? Yo te amo y jamás haría nada que te perjudicara a ti.
-Kanna: ¡Que no me llames así! Y no te creo nada estúpido.-Se agachó agarró otra piedra y me
la
lanzó, esta golpeó en mi pecho.
Me quedé callado mirándola, ella me lanzó otra piedra, esa fue directa a mi mejilla me golpeó fuerte haciéndome sangrar.
-Bill: Por favor Kannita para.
-Kanna: ¡Que no me llames así! Me da asco que me llames así.-Me lanzó otra piedra, esta golpeó en mi estomago.
-Bill: Por favor, tienes que creerme.
-Kanna: Asesino despiadado.
Me lanzó otra piedra mas grande que me golpeó en toda la cara, sentí que mi nariz y labios sangraban, ella me miró con desprecio y salió corriendo de allí.
-Bill: ¡Kanna no te vallas!.
Ella no me hizo caso y siguió corriendo, vi como se alejaba de mi y me dolía mucho verla alejarse de mi.
Me senté en el banco y suspiré, mi cara estaba toda llena de sangre, por las piedras que Kanna me había tirado, pero eso no me dolía es mas se me curó a los pocos minutos. Pero el dolor de verla tratarme de esa manera ese dolor no se iba.
Cuando las heridas de mi cara desaparecieron me fui de allí y volví a las alcantarillas, necesitaba matar para hacer desaparecer este dolor que siento dentro de mi.
Al llegar a las alcantarillas volví a mi forna de payaso, y me fui a un parque.
Me aparecí detrás de unos arbustos y allí había un par de niños que jugaban, yo saqué un globo y me acerqué a un niño que jugaba él solo en un cajón de arena.
-Pennywise: Hola niño.-Sonreí.
-Niño: Hola.-El niño sonrió al verme.
-Pennywise: ¿Quieres un globo?.
-Niño: Si.
El niño se levantó de la arena y se acercó a mi, yo solté una carcajada y miré al niño.
-Pennywise: ¿Te gustan los globos verdad?.
-Niño: Si.-El niño se aceró mas a mi y sonrió.
-Pennywise: ¿Quieres este verdad?-Acerqué el globo al niño, este lo miró y alargó la mano para cogerlo, pero cuando estaba a punto de agarrar la cuerda del globo yo lo aparté del niño, este me miró.
-Pennywise: ¿Te gustan los circos?.
-Niño: Sii.
-Pennywise: ¿Los payasos?.
-Niño: Me encantan los payasos, son muy divertidos.
-Pennywise: Si, mucho. Ven niño acercate toma tu globo.
El niño comenzó a acercarse hacia mi, yo sonreí y solté el globo, este flotó hacia el cielo, el niño miró el globo alejarse.
-Niño: ¿Por que has echo eso? Yo quería el globo.
-Pennywise: ¿Quieres flotar como ese globo?.
El niño me miró extrañado, mm si estaba comenzando a notar ese delicioso miedo.
-Niño: N...no, yo será mejor que vuelva a casa.
-Pennywise: No niño, tu ya no vas a volver a casa.
Sonreí y agarré al niño por el brazo.
-Niño: ¡Ah suéltame! ¡dejame payaso malo!.
Ahora si que sentía el delicioso miedo de ese niño, eso me hizo soltar una fuerte carcajada.
-Pennywise: No niño.
-Niño: Dejame, quiero volver con mi mamá.
El niño comenzó a llorar, cosa que me hizo sentir mucho mejor, lamí mis labios y miré al niño, este me miraba con terror, me encantaba esa mirada.
Sonreí y arrastré al niño hacia las alcantarillas, el niño gritaba y se resistía, pero yo era mas fuerte que él y tiraba de su brazo haciéndolo avanzar.
Al llegar a la alcantarilla lancé al niño hacia delante y este chocó contra la pared.
-Pennywise: Hoy tengo un mal día y tu me lo vas a alegrar.
Solté una carcajada que resonó por toda la alcantarilla, caminé lentamente hacia el niño que estaba en el suelo y pisé su mano, este gritó fuerte.
-Niño: Ah duele.
-Pennywise: Lo se niño, y esto te va a doler mas.
Necesitaba hacer sufrir a ese niño para sentirme mejor y clamar la tristeza y rabia que siento.
Agarré el brazo del niño y tiré con todas mir fuerzas hasta arrancárselo de cuajo, él niño soltó un fuerte alarido, le di una patada y lo estrellé contra la pared, el niño se golpeó la cabeza y murió.
Lo devoré entero, al acabar me senté en el colchón viejo y esa sensación de dolor volvió a mi, no lograba olvidar el trato de Kanna hacia mi y la verdad es que ni matar me calma este dolor, la amo y la echo de menos. No quiero que sufra pensando algo que yo no hice, quisiera estar a su lado apoyándola, pero ella me ha alejado, ella piensa que yo lo hice pero no es así.
Volví a salir de la alcantarilla en busca de mas niños a los que torturar y devorar.
****
Me quedé callado mirándola, ella me lanzó otra piedra, esa fue directa a mi mejilla me golpeó fuerte haciéndome sangrar.
-Bill: Por favor Kannita para.
-Kanna: ¡Que no me llames así! Me da asco que me llames así.-Me lanzó otra piedra, esta golpeó en mi estomago.
-Bill: Por favor, tienes que creerme.
-Kanna: Asesino despiadado.
Me lanzó otra piedra mas grande que me golpeó en toda la cara, sentí que mi nariz y labios sangraban, ella me miró con desprecio y salió corriendo de allí.
-Bill: ¡Kanna no te vallas!.
Ella no me hizo caso y siguió corriendo, vi como se alejaba de mi y me dolía mucho verla alejarse de mi.
Me senté en el banco y suspiré, mi cara estaba toda llena de sangre, por las piedras que Kanna me había tirado, pero eso no me dolía es mas se me curó a los pocos minutos. Pero el dolor de verla tratarme de esa manera ese dolor no se iba.
Cuando las heridas de mi cara desaparecieron me fui de allí y volví a las alcantarillas, necesitaba matar para hacer desaparecer este dolor que siento dentro de mi.
Al llegar a las alcantarillas volví a mi forna de payaso, y me fui a un parque.
Me aparecí detrás de unos arbustos y allí había un par de niños que jugaban, yo saqué un globo y me acerqué a un niño que jugaba él solo en un cajón de arena.
-Pennywise: Hola niño.-Sonreí.
-Niño: Hola.-El niño sonrió al verme.
-Pennywise: ¿Quieres un globo?.
-Niño: Si.
El niño se levantó de la arena y se acercó a mi, yo solté una carcajada y miré al niño.
-Pennywise: ¿Te gustan los globos verdad?.
-Niño: Si.-El niño se aceró mas a mi y sonrió.
-Pennywise: ¿Quieres este verdad?-Acerqué el globo al niño, este lo miró y alargó la mano para cogerlo, pero cuando estaba a punto de agarrar la cuerda del globo yo lo aparté del niño, este me miró.
-Pennywise: ¿Te gustan los circos?.
-Niño: Sii.
-Pennywise: ¿Los payasos?.
-Niño: Me encantan los payasos, son muy divertidos.
-Pennywise: Si, mucho. Ven niño acercate toma tu globo.
El niño comenzó a acercarse hacia mi, yo sonreí y solté el globo, este flotó hacia el cielo, el niño miró el globo alejarse.
-Niño: ¿Por que has echo eso? Yo quería el globo.
-Pennywise: ¿Quieres flotar como ese globo?.
El niño me miró extrañado, mm si estaba comenzando a notar ese delicioso miedo.
-Niño: N...no, yo será mejor que vuelva a casa.
-Pennywise: No niño, tu ya no vas a volver a casa.
Sonreí y agarré al niño por el brazo.
-Niño: ¡Ah suéltame! ¡dejame payaso malo!.
Ahora si que sentía el delicioso miedo de ese niño, eso me hizo soltar una fuerte carcajada.
-Pennywise: No niño.
-Niño: Dejame, quiero volver con mi mamá.
El niño comenzó a llorar, cosa que me hizo sentir mucho mejor, lamí mis labios y miré al niño, este me miraba con terror, me encantaba esa mirada.
Sonreí y arrastré al niño hacia las alcantarillas, el niño gritaba y se resistía, pero yo era mas fuerte que él y tiraba de su brazo haciéndolo avanzar.
Al llegar a la alcantarilla lancé al niño hacia delante y este chocó contra la pared.
-Pennywise: Hoy tengo un mal día y tu me lo vas a alegrar.
Solté una carcajada que resonó por toda la alcantarilla, caminé lentamente hacia el niño que estaba en el suelo y pisé su mano, este gritó fuerte.
-Niño: Ah duele.
-Pennywise: Lo se niño, y esto te va a doler mas.
Necesitaba hacer sufrir a ese niño para sentirme mejor y clamar la tristeza y rabia que siento.
Agarré el brazo del niño y tiré con todas mir fuerzas hasta arrancárselo de cuajo, él niño soltó un fuerte alarido, le di una patada y lo estrellé contra la pared, el niño se golpeó la cabeza y murió.
Lo devoré entero, al acabar me senté en el colchón viejo y esa sensación de dolor volvió a mi, no lograba olvidar el trato de Kanna hacia mi y la verdad es que ni matar me calma este dolor, la amo y la echo de menos. No quiero que sufra pensando algo que yo no hice, quisiera estar a su lado apoyándola, pero ella me ha alejado, ella piensa que yo lo hice pero no es así.
Volví a salir de la alcantarilla en busca de mas niños a los que torturar y devorar.
****
**Narra
Kanna**
Me alejé del bosque y corrí hacia no se donde, yo solo corría mas y mas, al llegar a un claro en el bosque me senté en una piedra y seguí llorando, me sentía tan sola, mi madre estaba muerta y el payasito al que tanto amaba él mi único apoyo ahora, resultó ser el asesino de mi madre, así que estoy sola.
Pennywise es lo peor, aunque me diga que él no ha sido, no lo creo, estoy segura de que ha sido él todas las pruebas lo señalan a él.
Seguí llorando desconsoladamente, entonces comenzó a llover, me levanté de la piedra y caminé bajo la lluvia hacia no se donde, por que a casa no quería volver, allí no.
Llegué al pueblo y caminé por las calles sin rumbo alguno, la lluvia estaba helada pero me daba igual ahora mismo solo quiero morirme, desaparecer de una vez y dejar de sufrir.
Crucé la calle y llegué a un parque, ahí me senté bajo la lluvia y me quedé con la mirada perdida en el suelo, oí pisadas pero no les hice caso, tras un rato me levanté y comencé a caminar hacia casa, mi vida ya no tenia sentido, no me queda familia ni tengo amigos, estoy sola en este mundo de mierda, mi padre me abandonó, mi madre esta muerta y Pennywise él es un monstruo que ha matado a mi madre, yo ya no tengo fuerzas para seguir viviendo, amo demasiado a ese payaso y me duele lo que ha echo, confiaba en él y él a acabado con mi madre, me siento sola y no quiero seguir sufriendo, así que lo mejor será desaparecer de una vez.
Llegué a casa, entré y me dirigí al baño, llené la bañera, una vez estuvo llena, agarré un cuchillo de la cocina, volví al baño me metí vestida dentro de la bañera, subí mis mangas y acerqué el cuchillo a mi brazo, apreté y comencé a cortar mis venas, hice lo mismo con el otro brazo, dejé caer el cuchillo y cerré los ojos, al fin dejaré de sufrir, al fin...
****
Me alejé del bosque y corrí hacia no se donde, yo solo corría mas y mas, al llegar a un claro en el bosque me senté en una piedra y seguí llorando, me sentía tan sola, mi madre estaba muerta y el payasito al que tanto amaba él mi único apoyo ahora, resultó ser el asesino de mi madre, así que estoy sola.
Pennywise es lo peor, aunque me diga que él no ha sido, no lo creo, estoy segura de que ha sido él todas las pruebas lo señalan a él.
Seguí llorando desconsoladamente, entonces comenzó a llover, me levanté de la piedra y caminé bajo la lluvia hacia no se donde, por que a casa no quería volver, allí no.
Llegué al pueblo y caminé por las calles sin rumbo alguno, la lluvia estaba helada pero me daba igual ahora mismo solo quiero morirme, desaparecer de una vez y dejar de sufrir.
Crucé la calle y llegué a un parque, ahí me senté bajo la lluvia y me quedé con la mirada perdida en el suelo, oí pisadas pero no les hice caso, tras un rato me levanté y comencé a caminar hacia casa, mi vida ya no tenia sentido, no me queda familia ni tengo amigos, estoy sola en este mundo de mierda, mi padre me abandonó, mi madre esta muerta y Pennywise él es un monstruo que ha matado a mi madre, yo ya no tengo fuerzas para seguir viviendo, amo demasiado a ese payaso y me duele lo que ha echo, confiaba en él y él a acabado con mi madre, me siento sola y no quiero seguir sufriendo, así que lo mejor será desaparecer de una vez.
Llegué a casa, entré y me dirigí al baño, llené la bañera, una vez estuvo llena, agarré un cuchillo de la cocina, volví al baño me metí vestida dentro de la bañera, subí mis mangas y acerqué el cuchillo a mi brazo, apreté y comencé a cortar mis venas, hice lo mismo con el otro brazo, dejé caer el cuchillo y cerré los ojos, al fin dejaré de sufrir, al fin...
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